En síntesis, desde sus narrativas las mujeres en sus diversidades y las personas clave expresaron, explícita e implícitamente, cinco puntuales recomendaciones para tener una vida digna, en tanto permanezcan en México, que se desprenden de las experiencias, maltratos que han enfrentado, temores y miedos frente a la VG.

  • Recibir por parte de los operadores jurídicos de instituciones públicas un trato de respeto a su dignidad humana y sin discriminación de ningún tipo.
  • Conocer los derechos fundamentales que les asisten y las instancias a las que pueden acudir en busca de protección y garantía de estos.
  • Acceder en mayor medida a servicios elementales de resguardo, alimentación, salud y capacitación para el trabajo, sea en organismos públicos u organizaciones de la sociedad civil o humanitarias.
  • Ampliar y mejorar la capacidad de respuesta de instituciones para regularizar su situación conforme a la ley y contar con un estatus jurídico y social que les dé confianza y seguridad en el territorio nacional.
  • Gozar de un trato solidario, humano y empático del pueblo mexicano, sin insultos, discriminaciones ni rechazo de ningún tipo.